Las ferreterías se encuentran entre los sectores más afectados por hurtos, algo que se debe principalmente a la gran variedad de productos que comercializan, los tamaños que llegan a ser discretos, así como de un elevado costo, características que los convierten en objetos muy preciados y atractivos para los ladrones.
Entre los productos que las ferreteras buscan proteger mayormente, y que lo pueden hacer a través de etiquetas magnéticas antirrobo, se encuentran los taladros con baterías, herramientas variadas, luces, temporizadores, paños electrónicos, así como materiales diversos que tienen gran valor en el mercado negro.
En las ferreterías generalmente existen dos tipos de robo, el primero es aquel que entra en el rango conocido como “robo hormiga”, que se produce por personas oportunistas, que aunque entraron a la tienda con el objetivo de hacer una compra, terminaron por percatarse de que no existen protecciones eléctricas o que al menos los empleados no hacen uso de ellas, e incluso aprovechan que los vendedores no están cerca, por lo que aprovechan el momento de descontrol para tomar el producto sin realizar el pago.
El segundo, es el caso de las pandillas que están bien organizadas. Entran a las tiendas con el firme propósito de llevarse no solo un artículo, sino todos los posibles y para ello se van equipados desde la manera de vestirse, con ropas holgadas, grandes bolsos de mano e incluso mochilas o elementos mecánicos.
Cuando una de estas pandillas llega a visitar un negocio representan un duro golpe para las finanzas del lugar, ya que suelen llevarse no solo un producto, sino muchas unidades de cada artículo, acción que realizan sin dañar o alterar su espacio exterior, por lo que resulta aún más difícil detectarlos en el momento.
Los avanzados sistemas anti hurto de la actualidad, como los sensores antirrobo, son discretos, innovadores, tecnológicos y eficientes, por lo que en sintonía con una atenta actitud de los empleados, logran resultados sorprendentes en la merma de los productos y para cualquier tipo de robo.
Creación de un ambiente de seguridad en el almacén
El “robo hormiga” es uno de los fenómenos más conocidos entre los diferentes negocios. Se trata de aquellos hurtos de poco o mucho valor, que al momento de hacer un inventario suman una gran cantidad, que se traduce en pérdidas.
El 99 por ciento de los negocios tiene que hacer frente a la situación, lo que los lleva a perder ganancias entre el 30 y 40 por ciento, incluso llegan a representar el diez por ciento del inventario.
Aunque hay diferentes tipos, los más comunes son los que se dan en el inventario de cualquier ferretería, los que provienen del personal interno, porque incluso se trata del 20 por ciento de los robos del total de una empresa.
Los sistemas antirrobo para ferreterías no solo protegen a la mercancía de los hurtos de los clientes, sino también del robo hormiga de los empleados. Si utilizamos los controles necesarios en las compras, ventas y el manejo de inventario, será más fácil evitar o al menos detectar este tipo de delito.
La mejor defensa contra los hurtos en el interior, además de implementar una medida de seguridad electrónica como un arco de seguridad, es instituir y complementar con un control de inventario frecuente y exhaustivo.
Otros procedimientos son revisar periódicamente los botes de basura (la basura es un medio frecuentemente utilizado por los empleados deshonestos), así como cualquier rincón o recovecos del negocio, además de realizar chequeos de inventario sin avisar. Son una manera efectiva en que los empleados deshonestos sabrán que corren el riesgo de ser descubiertos.
Hay tiendas que ponen como parte de sus “promociones” la de la obligación de recibir el ticket, ya que si no se recibiera al momento de pagar, el cliente puede recibir algún incentivo o el producto gratis. La realidad es que es una medida instaurada no tanto como beneficio al cliente, sino para tener mayor control de los movimientos de compra y obligar a los empleados a registrar en el sistema la venta, y así poder identificar las unidades de salida.
Sin lugar a dudas, los sistemas de alarma para los productos, así como los sensores antirrobo para tiendas siempre brindarán una solución eficaz y complementaria para la protección de la mercancía en el almacén.
Los sistemas de seguridad son una inversión cuya forma redituable es a través de los hurtos que se evitan. En pocos meses, la merma evitada amortiza los equipos y toda la inversión que se recupera a partir de ese momento, va directo a la columna de utilidades.
