Tiendas, locales de comida y otros pequeños negocios han ido optando progresivamente por diversificar sus pagos más allá del efectivo con el propósito de elevar sus ventas.
Tienditas, farmacias, fondas, ferreterías, florerías, y en general todas las tiendas del micro comercio, empezaron ya a integrar el cobro con tarjeta y aquellos que aún no cuentan con terminal electrónica, han implementado el método de aceptar transferencias electrónicas.
Si bien el uso de pagos electrónicos se ha empezado a popularizar entre los pequeños comercios, son las terminales más sencillas y menos sofisticadas las que más éxito han tenido, ya que los cobros con celular o mediante aplicaciones aún no gozan de mucha popularidad.
La digitalización de los pequeños comercios aún está en sus inicios, pues según datos de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC) sólo el 20% de los comercios ya está aceptando tarjetas como forma de pago, y de éstos, sólo el 27% de las ventas se realiza con tarjeta, y el ticket promedio de ventas con tarjeta es de 200 pesos.
Este proceso de digitalización en el pequeño comercio, ha tenido no sólo el propósito de incrementar las ventas, sino adicionalmente y de manera importante, hacer frente a la competencia que representan las tiendas de conveniencia que se han ido instalando en las zonas urbanas que anteriormente eran dominadas exclusivamente por las tienditas.
La agresividad comercial con que han llegado las tiendas de conveniencia ha provocado que entre tres y cuatro tiendas cierren cuando una tienda de conveniencia llega a la zona. Es por eso que las tienditas han ido progresivamente aumentando el uso de sistemas que facilitan la compra por parte de sus clientes.
