La exhibición es la forma en que se presenta la mercancía dentro de la tienda, en los escaparates, góndolas, sobre las mesas y repisas, así como en los exhibidores dentro del piso de ventas.
“El que no enseña no vende”, eso es una realidad, por eso los exhibidores se usan como medios de promoción para atraer la atención de los clientes, mostrarles lo que ofrecemos y tentarlos a comprar, además de que también se usan para promover la imagen de la tienda.
Según sea la manera como exhibimos la mercancía, nuestra tienda se verá más o menos bonita, más o menos atractiva, más o menos tentadora. En otras palabras, según sea la manera de exhibir, será la imagen de nuestra personalidad comercial.
Es importante tomar en cuenta que la exhibición de la mercancía no es un tema solamente estético, sino además es logístico, pues influye en la decisión de compra del cliente, ya que además de facilitar que el cliente encuentre rápidamente lo que desea comprar, provoque la compra de más productos que los que traía en mente al ingresar a nuestra tienda.
Acomodar la mercancía al azar o donde nos pegue la gana, no ayudará a generar ventas, sino lo contrario, el cliente no le verá pies ni cabeza, se sentirá desorientado y en el mejor de los casos terminará preguntándonos por lo que necesita.
Nada debe estar dónde está por casualidad, todo debe ser intencional, por eso a la hora de acomodar la mercancía necesitamos tener doble personalidad. Por un lado meternos en la cabeza del cliente, pensar como clientes, analizar cómo nos gustaría ver la mercancía, y, por otro lado, pensar como comerciantes y decidir qué queremos que nos compren más, qué mercancía queremos expulsar de la tienda y cuál queremos promover.
Aunque ya lo sabemos no está de más recordar que existen varios tipos de exhibidores:
Exhibidores al descubierto
Este tipo de exhibidor pone la mercancía al alcance de la mano del cliente, por lo que se debe tomar en cuenta que la mercancía no sea de gran valor y que no sean productos muy pequeños.
Exhibidores en el punto de venta
Consiste en repisas o mesas donde se presenta el producto cerca de la caja. Generalmente estos exhibidores se utilizan para promover ventas de impulso, es decir, los que dejan mayor margen de venta o los que queremos expulsar de la tienda.
Exhibidores de cabecera
Son los productos que se encuentran en los extremos, a la cabeza de las góndolas. Muchas veces se utilizan para poner la mercancía nueva o de mayor venta o los productos que deseamos promover.
Exhibidores del interior de la tienda
Se trata de las góndolas o mesas dentro del establecimiento donde se muestra el grueso de la mercancía y se secciona per departamentos como abarrotes, botanas, aseo personal, hogar, jugos y bebidas al tiempo, galletería, etc.
Exhibidores del exterior de la tienda
Hay locales que tienen la fortuna de poder contar con una vitrina o aparador que da a la calle, si es tu caso aprovéchala. Es una magnífica oportunidad de lograr que el cliente entre a la tienda. Toma en cuenta que debes renovar con frecuencia los productos exhibidos en los aparadores, además de mantenerlos limpios, libres de polvo.
Exhibidores de isla
Estos exhibidores los podemos comprar, pero también pueden ser proporcionados por los proveedores. Suelen ser cuadrados o redondos y ocupan un espacio limitado, lo que permite colocarlos al paso del cliente.
Estos exhibidores se utilizan para promover productos nuevos o promover la venta de los que se han atorado en el inventario, también se usan para exhibir productos de temporada o con alguna promoción.
Recuerda: el que no exhibe, no vende.
