En toda ciudad hay una enorme cantidad de locales comerciales y una inmensa variedad de ofertas de productos, pero unos nos invitan a quedarnos más que otros, lo cual no es una casualidad, sino que el secreto está en la organización del espacio y otros elementos, que hacen que el cliente desee entrar, permanecer y principalmente volver.
En los negocios más exitosos todo se pensó, cada detalle se diseñó pensando en el cliente: la mercancía y la manera de exponerla; los elementos gráficos como las etiquetas, los pósters y los banners, así como la ambientación, la temperatura ambiente, la música ambiental y hasta el entrenamiento del equipo de ventas, todo está diseñado para que el cliente entre al local, permanezca en él y regrese nuevamente.
Cada elemento completa y promueve otros, y es la combinación de todos estos factores lo que añade valor a lo que ofrecemos y hace funcionar al negocio. El secreto es crear un espacio con un diseño simple pero inteligente, planificar cada aspecto desde el inicio.
La organización del local debe transmitir consistencia, y se complementa con la actitud positiva de todos los colaboradores del negocio, el etiquetado de los productos, la señalización, las campañas promocionales, la organización de los productos, la ambientación del local, los exhibidores y todo el material auxiliar. Todos los detalles constituyen un todo.
Si queremos que nuestro local sea atractivo y lograr el objetivo final que es provocar el deseo y la compra, se deben tener en cuenta los siguientes aspectos:
- Idea: Proyectar, concretar y sostener una idea fuerte, sólida y sostenible en el tiempo, pues el diseño del local no es algo que se cambia con frecuencia ya que representa la identidad del negocio. La pregunta que aquí debemos responder es ¿qué imagen quiero transmitir a mis clientes con mi local?
- Proyecto: Debemos elaborar un proyecto integral desde la arquitectura, la decoración, la exhibición de productos, el etiquetado, las bolsas, todo. De lo general a lo particular, todos los elementos deben responder a una misma idea.
- Diseño: El diseño es un valor agregado que hace la diferencia entre nosotros y nuestra competencia, el diseño suma identidad entre nuestro negocio, el local y nuestros clientes.
- Decoración: El local es el espacio donde el cliente vivirá una experiencia de compra. Cuanto más cercano, propio y acogedor lo sienta, mayor y mejor será su experiencia dentro de nuestro local.
- Equilibrio: Todos los elementos que componen el local, como el color, espacios e iluminación deberán convivir en equilibrio para brindar una sensación de armonía y lograr un efecto positivo hacia el cliente.
- Percepción del color: El estudio del significado del color es imprescindible para lograr un efecto positivo y transmitir la intención dentro y fuera del local. Hay colores que son compatibles con una actividad económica, de la misma manera qué hay colores incompatibles con ciertas actividades.
- Movimiento: El movimiento es uno de los elementos de diseño y decoración que se utilizan para llamar la atención del cliente, desde la vitrina exterior y el acceso como en el interior del local. Es muy importante no dar una imagen estática y rígida, sino alegre y dinámica.
Da la impresión de que el diseño es un trabajo para profesionales, sin embargo, es cosa de partir de una idea simple, fácil de relatar, de entender, de recorrer y de exponer para asegurarse que el cliente entenderá nuestro mensaje.
Para lograr que el cliente se sienta cómodo y desee volver, se deberá, por sobre todo, aplicar el sentido común y fundamentalmente mantener estos conceptos a lo largo del tiempo.