Poner un negocio no es tarea sencilla, se necesita ser paciente, perseverante, analista, entre otras cosas, pero sobre todo, optimista.
Uno de los retos más importantes que vive un emprendedor es enfrentar las dificultades. Según algunos estudios sólo una de cada diez empresas sobrevive al segundo año, pero ser parte de las empresas que sobreviven no es tan difícil, lo más importante es conocer tu negocio y saber qué hacer si las cosas no van como las planeaste.
Toma en cuenta estos 5 puntos para superar dificultades de tu empresa y seguir adelante:
Tener un modelo de negocio claro y que satisfaga necesidades.
Los consumidores no compran productos, satisfacen sus necesidades, si encuentras una necesidad y vas a darle la satisfacción, tu producto tendrá más probabilidades de éxito.
Es importante tener en cuenta el tamaño de tu mercado, si la necesidad que satisfarás impacta a muy pocos usuarios tu mercado será también de muy pocos clientes, en cambio si es una necesidad no atendida en tu comunidad, es la oportunidad perfecta para crear un negocio.
Conoce muy bien tu negocio.
¿Qué diferencia a tu negocio de la competencia?, cuáles son tus costos, qué y cómo lo ofrece tu competencia, no dejes nada al azar. La propuesta de valor que ofreces a tus clientes debe ser similar al valor que ellos están percibiendo de tus productos, ¿Ya tienes claro cuál es esa propuesta? si no la tienes, deberías comenzar a pensar en una, esto es lo que responde al porqué y para qué está hecho tu negocio.
El precio no tiene que ser el más bajo, de hecho si conoces muy bien tus fortalezas puedes tener un precio justo sin necesidad de que sea el menor del mercado.
Comunica el beneficio.
Ya tienes la oferta de valor, ahora vamos a darla a conocer a nuestros clientes de forma correcta, hay muchas maneras de comunicarlo, puedes usar cartulinas de preferencia impresas, pero también puedes crear frases para dar la bienvenida a tus clientes o para despedirlos, de tal forma que comuniques por qué es mejor tu negocio que la competencia.
Experiencia del cliente.
Está directamente relacionado con el servicio al cliente, requiere un seguimiento de la experiencia del cliente con tu producto desde el momento en que lo consume hasta que lo desecha, estar abierto a realizar mejoras constantes y regresar al punto uno, si es necesario volver a iniciar el proceso y probar.
Hay diferentes formas de conocer la satisfacción de tus clientes, ya sea por medio del contacto directo que tengas con ellos o por medio de tus redes sociales, mantenerte al tanto de los comentarios en Facebook y la calificación promedio de tu producto/servicio puede ayudarte a sacar conclusiones.
Corregir, probar, aprender y volver a empezar.
Si los resultados no son los esperados vuelve a revisar los puntos en retroceso hasta encontrar el error, si es necesario incluso vuelve al punto uno, pero hazlo rápido, en 2 o 3 meses sabrás si el camino que tomaste es el correcto o no, vuelve a ajustar tu modelo y vuelve a probar.
Lo importante es aprender de los errores. Podrás aprovechar de los errores que otros han cometido, en las redes sociales el conocimiento es público y si le dedicas unas horas a la semana puedes volverte experto en las herramientas que necesitas,
Al final la actitud que tengas a la hora de enfrentar el problema definirá en gran parte el resultado final, si te aplicas con disciplina a tu negocio, pones en práctica el conocimiento adquirido, aprendes de los errores y estas siempre ajustando y mejorando seguro que encontrarás el camino para tener un negocio exitoso.
