Buenos productos, trato excelente, magnífica ubicación, precios competitivos, marketing eficiente y una buena imagen. Son los seis ingredientes que aseguran el éxito de cualquier negocio. ¿Se puede prescindir de alguno de esos ingredientes?
Seguramente has visto negocios exitosos con mal servicio, incluso algunos hasta sucios, y pelean comercialmente con sus precios inigualables, o son exitosos por su ubicación. Sin embargo, el éxito no debe basarse en la ausencia de una competencia eficiente. Por eso es muy importante no descuidar la imagen del negocio.
Muchos comerciantes no caen en la cuenta de que todo lo que tenga que ver con su tienda está enviando un mensaje directo y continuo a su público. ¿Qué transmite una tienda con basura en el piso y mercancía empolvada? O por el contrario ¿qué mensaje envía al cliente una tienda limpia, ordenada y con buen aroma? Esto hace que cuidar el local y hacer que luzca ordenado y limpio sea uno de los requisitos más importantes para transmitir confianza a los clientes.
Cómo organizar un plan de limpieza en tu local
Para una eficiente ejecución de las tareas de limpieza conviene distinguir las actividades de limpieza diaria de las tareas de limpieza profunda.
Limpieza diaria
Mantener el local pulcro y ordenado no se da de manera natural porque una tienda que tiene vida constantemente se ensucia y se desordena. El polvo, la bolsa que se rompe, la leche que se tira, todo a cada instante tiende a ensuciar la tienda. Por eso se requiere un plan de limpieza diaria más un plan de limpieza profunda al menos cada mes.
Algunos comerciantes han implementado planes de limpieza cada hora y otros dos veces al día, además la limpieza de emergencia cuando se tira un refresco o se rompe una cerveza.
Para que no sea una tarea fastidiosa que termine por no hacerse, es recomendable rotar la tarea entre los colaboradores de tal forma que a todos les toque hacerlo al menos una vez al día.
Limpieza profunda
Más allá de la limpieza de mantenimiento que se debe hacer diariamente en el local comercial, es importante planear varios momentos al año para realizar una limpieza profunda, reordenar las estancias y mejorar la imagen del espacio.
Plantear una limpieza profunda es algo más complejo que llevar a cabo las tareas habituales de mantenimiento, puesto que se necesita tiempo, productos, equipo y los mejores trucos de limpieza para dejarlo todo reluciente.
Lo primero que se debe decidir es en qué fechas conviene realizar la limpieza general. Evidentemente, este tipo de actividades es incompatible con la actividad diaria de la plantilla.
Se recomienda por tanto hacer estas limpiezas en periodos de vacaciones de los estudiantes, cuando hay menos tráfico de clientes y baja la actividad.
¿Qué tareas debe realizar una limpieza profunda?
En la ejecución de la limpieza profunda se asea en los lugares a donde no se llega en la limpieza diaria, esos rincones inalcanzables, esas zonas donde se acumulan residuos de material orgánico que genera ratones, cucarachas y mal olor.
En esta actividad se hace limpieza de suelos, cristales, anaqueles, refrigeradores, área de caja y techos, eliminación del polvo de todas las superficies, abrillantado y quizá pulido del suelo. Son muchas las tareas necesarias para la perfecta limpieza de la tienda. Para evitar omisiones, es conveniente hacer una lista de las tareas a realizar.
